viernes, 31 de agosto de 2012

SOLOMILLO CON FOIE



Seguimos despidiendo el verano con mucha pena, una excusa perfecta para disfrutar cenando un solomillo con foie fresco.  El foie o hígado de oca o pato, originario del suroeste de Francia (Gers, Dordogne, Les Landes) los podemos comprar de distintas formas;
- En crudo, dependiendo del cocinado hay varias categorías: foie-gras extra para comer crudo sólo salpimentado, también puede ser cocinado sin miedo a que se deshaga; foie-gras de primera (el que he usado para acompañar al solomillo) que resiste menos el cocinado ya que se deshace con relativa rapidez en la plancha.
- Patés a partir de foie-gras tout venant: son los que habitualmente encontramos en tarros de cristal o enlatados en algunos supermercados o tiendas gourmet y que se acostumbran a consumir  a temperatura ambiente con tostas. Podemos optar por la versión mi-cuit (pasteurizado a 80 grados) en semiconserva que se debe conservar en el frigorífico  y por un tiempo limitado y la versión en conserva (esterilizado a  100 grados) que puede  guardarse hasta 4 años en la despensa.

El plato es sencillo y de elaboración muy rápida;
a)      Se  calienta la plancha al máximo con un poco de aceite de oliva y acto seguido se disponen los solomillos de ternera (en medallones de 1cm de grosor)
b)      Dos minutos de plancha cada cara de manera que quede algo crudo por enmedio, añadir sal Maldon al gusto y reservar en plato caliente.
c)       Se enharinan ligeramente las dos caras del foie (¡no se trata de  rebozar!) y se añaden a la plancha  como máximo 1 minuto entre las dos caras. Si nos pasamos de tiempo sencillamente nos quedamos sin foie. Añadimos sal Maldon al gusto.
d)      Colocamos el foie encima del solomillo y se consume en caliente.
e)      Posibles acompañamientos: reducción de oporto o Pedro Ximenez, tosta de  pan frita,  puré ligero de patatas o  manzana al horno.
Gran plato; tan fácil y bueno como caro...

Como vino tomé un tinto del Priorat a falta de un cava brut nature que posiblemente le habría ido mejor.
Excelente despedida del verano.

Fuente: 

martes, 28 de agosto de 2012

VERANO. ESTIU. ÉTÉ.


Se acaba el verano. He parido un blog. Playa cantábrica con mucho sol, playa mediterranea con gazpacho y más sol, siempre con la mejor compañía. ¡Qué sufrimiento! Una porción de Francia avascada y Vall d'Aran afrancesado. Nos perdemos, la barrera de la autopista no se levanta, en 20 minutos una francesa muy amable nos devuelve la tarjeta y levanta la barrera. La naturaleza se despliega a lo grande, bella e irascible en Eths Uelhs deth Jueu, la compañía incluso mejor. Y  en el asunto del yantar  de todo hubo; un conejo a la brasa excelente y un paté de jabalí que no tanto. Sidra con con el tradicional  y delicioso bollo preñao, arroz con marisco en el Delta y experimento de paella en casa que debo seguir practicando. Entretanto han caído alguna pizza, unos boquerones fritos deliciosos y todos los melocotones de  Calanda. Gracias verano. ¡Seguimos con el blog!

Bollo Preñao, inmejorable pan y chorizo asturiano.
Los croasanes franceses no son los mejores...
¡Uauuu!
Tan tostaditas, tan crujientes y  mediterraneas...

martes, 7 de agosto de 2012

EL MILAGRO DE CALANDA



En 1640 la Virgen del Pilar obró un milagro en la persona de Miguel Pellicer haciendo brotar de su muñón una nueva pierna  después de que le fuese amputada  casi tres años atrás. Este hecho sucedió en Calanda, municipio de la provincia de Teruel.  No obstante ese no es el único hecho transcendente que allí ha acontecido;  esta tierra  a la vez agreste y soleada, origen de Luís Buñuel  y la Rompida de la Hora, produce un manjar  anual como si  de un don  del Altísimo se tratara: el melocotón (Prunus Persica).

De paso por Calanda he adquirido una  buena cantidad de melocotones con esta denominación de origen. La relación calidad-precio es, nunca mejor dicho surrealista; un quilo ronda los 60 cts. ;  sabed que el calibre de cada pieza oscila entre los 70-80 mm (son muy grandes…) con lo que tres piezas ya son más de un quilo; finalmente  me he llevado una caja de 12 quilos de melocotones que es lo que se estila en la zona para repartir entre la familia.

                                                      ¡Qué melocotones!
 
Este fruto de origen oriental (de ahí su nombre científico)  recibe en esta zona del Bajo Aragón una serie de cuidados de cultivo específicos  y totalmente artesanales que contribuyen al magnífico resultado final.  Por una parte  tenemos el vaciado que consiste en eliminar  hasta un 70% de los frutos incipientes del árbol  para que  los que quedan ganen tamaño y mejoren el sabor.   A principios del verano se realiza  un embolsado individual  para conservar la salubridad, limpieza y color del melocotón. Gracias a estos procedimientos obtenemos un melocotón grande, uniforme y sin marcas en la piel. 

La primera particularidad de este fruto es un potente efecto ambientador;  desprende un olor agradable e intenso  que anticipa su sabor. Huelen a verano.  El color  es predominantemente   naranja-amarillo pajizo  en ocasiones con manchas pálidas  rojizas, en la pulpa predomina el color amarillo. Presenta bastante  pelusilla que se retira con facilidad  con el obligado lavado de toda fruta.  La piel  es bastante fina  y se mezcla con la carne de la pulpa con un ligero masticado; diría que se puede y se  debe consumir a no ser que se tengan objeciones insalvables con esta parte de la fruta. 

Como ya habréis supuesto, el sabor de la pulpa es excepcional, muy dulce y jugosa,  con una textura de la  carne  densa y bien adherida al hueso.  En otro orden de cosas  existe la variedad almibarada de melocotón de Calanda que vamos a reconocer, además de por su sabor porque conservan el hueso, así que hay que comerlo sin prisas… En resumen; se trata de una fruta en estado de gracia que bien se merece una pasadita por esta comarca. 

Fuentes:

jueves, 2 de agosto de 2012

REPENSAR LA COMIDA


Con vuestro permiso voy a ponerme serio si es que hablar de comida alguna vez fue frívolo. Desde este rincón  de la red quiero difundir y apoyar el programa DESAFIO CRECE  que ha lanzado Intermon-Oxfam. Consiste en  una iniciativa para modificar nuestras acciones con los alimentos que  supone una apuesta por la sostenibilidad en un planeta en el que millones de personas pasan hambre.
Se trataría de poner en práctica el consabido lema piensa globalmente y actúa localmente de manera que pequeñas acciones cotidianas en nuestra cocina  sirvan para equilibrar el actual sistema mundial de alimentación, tan desigual y tan injusto.


La campaña se centra en cuatro tipos de acciones que me gustaría compartir con vosotros/as:
a)      AHORRAR COMIDA: consiste en planificar y reutilizar para no desperdiciar. Un tercio de lo que compramos se tira… Proponen varias iniciativas entre las que podemos destacar las de llevarnos la comida sobrante del restaurante (¡fuera vergüenza y convencionalismos!) o elaborar  listas de la compra inteligentes que encontraréis en el link al final de este enlace. Si nos sobran  “retales” de alimentos en la nevera podemos elaborar bocatas o sopas, sería interesante poder compartir en este blog diferentes ideas de cómo aprovechas esas sobras que de otra manera se echarían a perder.
b)      CONSUMIR ALIMENTOS DE TEMPORADA: el gazpacho es para el verano,  la naranja para el invierno y las castañas en otoño.  Comprando productos de temporada contribuimos a reducir el consumo energético. A esto hay que añadir la necesidad de comprar productos de la zona o región; en conclusión que el  mejor sitio para comprar es el mercado tradicional o cooperativas agrarias, donde por un poco más favorecemos  al pequeño productor, disminuimos emisiones del transporte  y consumimos productos de primerísima calidad. Si investigáis seguro que tenéis un mercado cerca que os está esperando… Sobra decir que los productos de Comercio Justo, aunque de origen lejano, son una excelente opción de compra responsable
c)          CONSUMIR MENOS CARNE Y LÁCTEOS: son necesarias grandes cantidades de recursos naturales para generar los productos cárnicos por lo que con solo evitar su consumo  una vez a la semana se reduce  el impacto ambiental que supone la cría de animales. Los lácteos se pueden sustituir: aceite de oliva en vez de mantequilla o granizado en vez de helado o yogurt.
d)      COCINAR CON RESPONSABILIDAD: evitar cocciones o frituras prolongadas que consumen gran cantidad de energía  a la vez que  repercuten en la calidad de los nutrientes de los alimentos. Consumir sopas frías (gazpacho, vichisoysse, sopa de tomate, ajoblanco…) que no requieran cocinado. Muchas verduras pueden ser consumidas crudas o semicrudas; zanahoria, cebolla, pimiento, brócoli, judías verdes… y aportan sabores originales a los platos. Por supuesto el ahorro de agua mientras cocinamos también es muy importante; lavar los alimentos en recipientes y siempre que sea posible cerrar las ollas durante la cocción. Es interesante también aprovechar el calor residual que se desprende una vez apagados los fogones para terminar de cocinar los alimentos.
Espero que estas recomendaciones nos puedan  servir para disfrutar de la comida, sabiendo que  disfrutamos todos de la comida, consumiendo menos energía y comprando con cabeza. Son solo pequeñas acciones que sin embargo consiguen grandes resultados. Espero poder enriquecer esta entrada, y la iniciativa, con vuestras aportaciones…

Fuente:

 Fuente de la foto:

miércoles, 1 de agosto de 2012

UN BLANCO QUE CONVENCE...


Con la excusa de regar unas anchoas mediterràneas  y unos  mejillones de roca he podido disfrutar de  un vino blanco de la D.O Priorat que calificaria de sorprendente.  Se trata del Blanc de bótes 2008  que comercializa la bodega familiar  Clos Berenguer a partir  de viñedos viejos. Reconozco que no habia considerado el blanco del Priorat como una opción ya que los caldos más apreciados y comentados de esta D.O son los tintos; no obstante la cata experimental ha resultado excelente.

                                                       La botella, después de dar buena cuenta  de su contenido...
 
El vino está compuesto por las variadades de uva Garnacha blanca al 50%, Xarel.lo al 40% y Pedro Ximenez  al 10% . El dulzor de este ultimo porcentaje, algo exótico en la D.O, sin duda se nota, creedme. 
Me da la sensación de que es un vino blanco maduro  (6 meses en barrica)  pero que no pierde frescura. El color dorado-verdoso es ya de por sí llamativo pero lo sorprendente viene con los aromas a fruta blanca (piña y pera), miel, almendras y un ligero rasgo terroso característico en estos vinos. A pesar de esta sinfonÍa  aromática no le faltan las notas de frescura y floralidad del vino blanco, tan apreciadas en estos tiempos de canícula. Es un vino complejo, con alta graduación (13,5º), pero agradecido, que convence a la primera.  Si lo que se busca es un blanco habitual este no es  el vino que elegiría, pero para el que  disfrute con nuevos sabores  se trata de una apuesta de éxito seguro; el vino gusta y gusta mucho.
Os recomiendo que lo probéis…

Fuente consultada: