viernes, 25 de octubre de 2013

SALTEADO DE REBOZUELOS Y TROMPETAS DE LA MUERTE CON BUTIFARRA


Otoño en la mesa.
La setas son al otoño como finales de octubre  es a los muertos. Todos estos conceptos se mezclan en la receta que hoy os presento... no asustarse, líbreme el Señor de la necrofagia. Este salteado lo componen elementos puramente otoñales, pero sobre todo comestibles: el rebozuelo (también rossinyol o Cantharellus cibarius) y las trompetas de la muerte (Craterellus cornucopioides), con ciertas reminiscencias fúnebres; debe ser porque estan que te mueres... Ambas setas poseen una curiosa forma atrompetada que hace necesaria una limpieza apurada de la tierra que puedan contener; siempre en seco, con un cepillo o pincel.  La butifarra es intemporal y los que me conocéis  sabréis que le tengo afecto y cariño, así que la he añadido porque sí, porque me llena de orgullo y satisfacción. 


El resultado es una mezcolanza más contundente de lo que podría parecer. Si bien estas setas suelen cocinarse como guarnición, en este caso, al añadirle butifarra, nos encontramos ante un plato bastante completo; ideal para una cena intensa o una comida ligera (el desayuno de setas todavía no lo he probado) El caso es que se trata de un plato  de cocinado sencillo y lleno de contrastes como el aroma terroso  de las setas infiltrado por el  sabor graso y sutil de la butifarra; vamos, que está muy bueno.  Manos a la obra, vamos a necesitar:
- 250 g de rebozuelos frescos y limpios (7 €) Si  tienes intención de consumir más cantidad debes saber que  más  de 100 o 200 kg de esta seta en un tacada resultan tóxicos  por contener trazas de  amanitinas
Rebozuelos, tan simpáticos con sus poquitas amanitinas.
- 250 g de trompetas de la  muerte frescas y limpias (5 €)
- 200 g de butifarra blanca troceada en dados muy pequeños
- 1 cebolla pequeña
- 1 ajo laminado
- Sal y aceite de oliva.

Para preparar el salteado procederemos así:

1.- Laminamos el ajo  y picamos finamente la cebolla. Añadimos una pizca de sal y  ponemos a pochar a fuego medio-lento.
2.- Troceamos las setas  con un tamaño medio (tened en cuenta que tienden a menguar con el cocinado)
3.- Añadimos la butifarra  troceada a la sartén del ajo y la cebolla ya pochada.
 Trompetillas espatarrantes...
Mantenemos a fuego medio unos 5-8 minutos.
4.- Añadimos las setas, mantenemos a fuego medio unos 5-10 minutos mientras removemos, hasta que veamos que adquieren una textura tersa (algo así como cuando la pasta está  al dente...) y por último salamos al gusto antes e servir
5.- Podemos  emplatar a modo de timbal regado con aceite de albahaca,  como en  la foto,  o bien sobre tostas a modo de bocadito. En cualquier caso el otoño va a saturar vuestras papilas sin que lo podáis remediar...

¡Buen provecho y mejor Halloween!





El muerto al hoyo y el vivo al bollo...

jueves, 17 de octubre de 2013

Soup & friends : SOPA DE CALABAZA Y JENGIBRE



Hola gastrópicos! Bienvenidos  a  soup&friends, una sección para amantes de la sopa. Después de Schopenhauer y el Barça lo que más me gusta es la sopa. La RAE define este alimento como "plato compuesto de rebanadas de pan, fécula, arroz, fideos u otras pastas, y el caldo de la olla en que se han cocido" pero en soup&friends sabemos que la sopa es mucho más; un alimento completo y versátil, caliente o frío, con o sin tropezones, caldo que alivia las panzas y eleva los espíritus. Poco importa si andas a la sopa boba, si estas hecho un sopas o si os dan sopas con ondas. Sopa, caldo o consomé; Mafalda ha muerto; ¡viva el sopicaldo!

La primera sopa de esta temporada no es en absoluto clásica; calabaza y jengibre (Zingiber officinale), una combinación ingeniosa y bastante armónica. La calabaza aporta color y textura cremosa y el jengibre da el toque terrorífico que potencia el sabor de todo el conjunto. Un plato original para cenar la noche de Halloween antes de taparnos con la manta por encima de la nariz a la espera de cualquier súcubo despistado.
¡Qué sabrás tu!


Para  cocinar esta sopa vamos a necesitar:
- 1 kg de calabaza pelada y troceada en dados.
- 500 ml de agua caliente
- una nuez de jengibre fresco rallado ( a más jengibre más picante)
- 1 cebolla mediana
- 1  cucharadita de comino molido
- Aceite de oliva
- Sal y pimienta al gusto

Elaboración:

a)  En una olla rehogamos la cebolla troceada  hasta que se dore.
b) Añadimos la calabaza troceada y rehogamos 5 minutos.
c) Añadimos 250 ml de agua, el jengibre y el comino molido. Dejamos a fuego medio 15-20 minutos.
e) Cuando la calabaza esté tierna, salpimentamos y pasamos bien por la batidora.
 f) Añadimos el resto de agua y dejamos a fuego medio 10 minutos más y ya.

Se presenta caliente con picatostes y si hay confianza se sorbe sonoramente...

¡Feliz Halloween!

Con esta receta participo en el Reto de Octubre de Cocineros del Mundo en Google+ , apartado Salado.


Fuente:

http://lacasasintiempo.com/es/sopa-de-abobora-com-gengibre/

jueves, 3 de octubre de 2013

SCONES CON ARÁNDANOS Y PASAS


Confituuura, ven a mííí...
Escocia es una isla dentro de otra isla. En esas tierras altas pude  experimentar  una naturaleza aparentemente amable, ciudades con castillos y ejecutivos con faldas. Me saldría una entrada demasiado larga si   describiera los rinconcillos de Edimburgo, los lagos misteriosos con y sin monstruo y las colinas marcianas de la  Isla de Skye... En vez de todo eso os hablaré de unos panecillos tipicamente scottish que probé en Londres; los scones o bollos, en castellano, no suelen faltar en todo desayuno o té de la tarde que se quiera llamar inglés. Su sabor, ni dulce ni salado, pero sí amantequillado (¡estoy hecho un poeta!) combina  de maravilla con cualquier confitura, pero no debemos renunciar a comerlos con salmón, jamón o queso.  Lo normal es ver el scone  repleto de  confitura de frutas del bosque y una buena porción de Clotted cream, una nata muy densa  habitual por aquellos lares. Como quiero que mis arterias aguanten más o menos hasta los 120 me abstengo de usar esta cremita. No así de la confitura de moras; recolectada, cocinada y envasada por el mismo que os da la turra con los scones.
Para elaborar  media docena de estos bollitos vamos a necesitar:
- 225 g. de harina
- 90 g. de mantequilla
- 70 ml de leche
- 1 sobre de levadura química (Royal)
- 1 cucharada de azúcar
- Una pizca de sal
- 1 huevo
- 25 g aprox. de  arándanos desecados y troceados
- 25 g aprox. de  pasas sultanas
- Confitura al gusto; en este caso de moras silvestres
Eilean Donan Castle; deep Scotland.
Preparación: bastante fácil, tened en cuenta que me levanté el sábado y en el tiempo que tardó Anita en desperezarse ya estaban los bollitos hechos.
a)  Tamizamos y mezclamos la harina, la sal y el azúcar.
b) Añadimos la mantequilla en dados y mezclamos con los dedos hasta conseguir una especie de migas. Incorporamos las pasas y los arándanos. 
c) En un bol  mezclamos el huevo y gran parte de la leche. Añadimos la mezcla a las migas.  Amasamos ligeramente, no demasiado.
d) Estiramos con las manos la masa en una superficie enharinada con un grosor de unos 3-4 cm.
Bollitos, scones, biscuits... hechos para gustar.
e) Con un cortador les damos la forma deseada. En este caso les he dado forma cilíndrica moldeando la masa con las manos, cada scon ha quedado a su aire, mejor.  Disponemos los pseudocilindros en un papel vegetal y sobre una bandeja de horno, los  pintamos con el resto de la leche.
f) Horneamos a 200 ºC  hasta que los veamos dorados, unos 12-15 minutos.
g) Una vez templados los cortamos por la mitad y rellenamos. 

Los scones se pueden consumir en frío pero templados conservan una textura mullida  que los hace ideales para tomar con una relaxing cup of tea en la Castle Square. En cualquier caso, a no ser que uno coleccione proyectiles arrojadizos, es bueno comerlos el mismo día de su cocinado, a más tardar para el desayuno del siguiente.

Enjoy your breakfast!

Mis años mozos: ¡cuánto pelo!  y la vaca también...



Fuentes:

 http://www.bbc.co.uk/food/recipes/scones_1285
http://masedimburgo.com/2013/05/09/scones-escoceses-receta/